"¿Y por que publicas tantas huevadas?" Me preguntó el colorado, a lo que muy suelto de huesos le contesté “Porque tengo demasiadas cosas que decir, y cada vez que encuentro algo me da ganas de contárselo a alguien que esté dispuesto a escucharlo, si no quieres leerlo o cantarlo a voz en cuello mejor no entres”. El colorado me miró con los ojos saltones y me dijo “ta bien cholo, pero no te molestes, sólo era curiosidad jaja”. Me dí cuenta que la respuesta había sido un tanto a la defensiva, extendí la mano y le cogí el cuello a lo que me sonrió. “Yo no escribo ni mi nombre, me da flojera” bromeó y reímos a carcajadas.
Seguí, “antes me quedaba callado y me guardaba todo, es por eso que me vuelvo tan hablador cuando estoy en bomba o cuando converso con alguien que me agrada, creo que ha estado bajando poco a poco como la presión de una gaseosa que ha sido agitada. Desde que reabrí este blog ha estado bajando la presión, poco a poco (en todo sentido).”
julio 09
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