2009-05-16

hay que reconocer...


Para escribir hay que leer, y con esa convicción a lo largo de los años he acumulado muchos libros, de los cuales bastantes... bastaaaantes... baaaaaaaassssstaaaaaaaaaaaaaaaaantes ("a loooot"... chongo exclusivo para los "fans" de drawn together) están pendientes... Y otra de mis medidas correctivas es avanzar con mis libros pendientes. El otro día tome uno que siempre me gusto y siempre dejaba a la mitad, es una compilación de cuentos de escritores peruanos noveles y marketeados (nadie dijo los mejores) y donde figuraba en la lista un escritor que en sí no era de mi agrado, leí un libro, y varios cuentos que saco hace unos años y la verdad me pareció lleno de clichés (si, yo criticando clichés) y bastantes lugares comunes, pero aun así se lo aclamaron o mejor dicho publicitaron. Bueno, desde entonces es una de las cosas que no quisiera hacer o ser cuando publique un libro por mi cuenta, obviamente que pedro capitán cucaracha, luchoblues y Leo Dolores escudriñarán y revisarán hasta si suena bien leído en reversa, son los únicos en los que confiaría que le bajaran el motor a un texto mío, peor si lo voy a publicar. Bueno, tomé mi librito cómodamente sentado en un lugar que no voy a mencionar, y abrí al random una página y empecé a leer un cuento de inmediato, y me pareció muy bueno de verdad. Cuando termine de leer, regrese a la primera hoja en acto similar a felicitar al chef (eso no se hace en Perú, que huachafo) y veo el cacharrazo de este patín que "no me parecía bueno" (aparte que es bien posero para las fotos). En fin, tengo que reconocerlo, dicho escritor no es malo, para nada, es más, tengo mucho que aprender de el, en especial el tema de los signos de puntuación, los cuales conozco al cansancio pero que al momento de escribir te llegan al pincho (hay que aprovechar la inspiración).

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